Pollo glaseado con arándanos y romero

El aroma de un plato al horno siempre evoca momentos especiales, y cuando los arándanos frescos se combinan con el pollo, el resultado es una explosión de sabores dulces y salados que sorprende a cualquier paladar. En esta receta, los arándanos no solo añaden un toque de frescura y color, sino que también aportan sus propiedades antioxidantes, lo que convierte este plato en una opción saludable para disfrutar en cualquier época del año.

Desde Cuna de Platero, hemos trabajado con esmero para llevar hasta vuestra mesa los mejores arándanos frescos, cultivados con dedicación. Este plato combina ingredientes tradicionales como el romero y el ajo, con el sabor único de los frutos rojos, creando un equilibrio perfecto entre salud y placer culinario.

Ingredientes

4 muslos de pollo
150 g de arándanos frescos de Cuna de Platero
2 ramitas de romero fresco
2 cucharadas de miel
1 cucharada de vinagre balsámico
2 dientes de ajo
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto

Pasos para la preparación de esta receta saludable

La magia de esta receta radica en la combinación de ingredientes sencillos que, juntos, crean un plato único y delicioso. Con arándanos frescos que aportan su dulzura característica y el toque herbal del romero, este pollo glaseado es una muestra de cómo la cocina puede ser tanto creativa como accesible. Sigue estos pasos y disfruta de un plato equilibrado, ideal para compartir en cualquier ocasión especial.

Paso 1: Precalentar el horno a 200°C y preparar los ingredientes

Para comenzar, es fundamental precalentar el horno a 200°C. Este paso asegura que el pollo se cocine uniformemente y obtenga una textura crujiente por fuera y jugosa por dentro. Mientras el horno alcanza la temperatura adecuada, aprovecha para preparar todos los ingredientes.

Lava los arándanos frescos de Cuna de Platero, pela los dientes de ajo y corta las ramitas de romero fresco. Asegúrate de que los muslos de pollo estén limpios y secos, listos para ser sazonados con todos los ingredientes. Esta preparación anticipada facilita todo el proceso de cocción.

Paso 2: Colocar los muslos de pollo en una bandeja para hornear y añadir sal, pimienta y romero

Una vez que los ingredientes estén listos, coloca los muslos de pollo en una bandeja adecuada para hornear. Espolvorea generosamente sal y pimienta por ambos lados del pollo para potenciar su sabor desde el primer mordisco. El toque aromático del romero fresco es clave, distribuye las ramitas por encima del pollo, permitiendo que el aroma herbal se mezcle con los jugos naturales durante la cocción.

Este sencillo pero esencial paso garantiza que el pollo absorba los sabores de las especias desde el principio. Si prefieres un sabor más intenso, puedes frotar ligeramente el romero sobre los muslos antes de colocarlos en la bandeja.

Paso 3: En una sartén, preparar el glaseado mezclando miel, vinagre balsámico, ajo picado y los arándanos

Mientras el pollo se marina con las especias, vamos a preparar el glaseado que le dará ese toque especial. En una sartén a fuego medio, combina dos cucharadas de miel con una cucharada de vinagre balsámico. A medida que se calienta, añade el ajo picado, permitiendo que su fragancia se integre con la mezcla.

Cuando la miel y el vinagre estén bien incorporados, añade los arándanos frescos. Estos aportarán dulzor y acidez, creando un contraste delicioso con el romero y el ajo. Cocina todo durante unos minutos hasta que los arándanos empiecen a reventar y el glaseado adquiera una consistencia ligeramente espesa.

Paso 4: Verter el glaseado sobre el pollo y hornear durante 35-40 minutos

Una vez que el glaseado esté listo, es el momento de verterlo sobre los muslos de pollo. Asegúrate de cubrirlos uniformemente, permitiendo que el glaseado penetre cada parte del pollo, impregnando la carne con el sabor dulce y ácido de los arándanos. El contraste entre el pollo y los frutos rojos hará que el plato se destaque tanto en sabor como en presentación.

Hornea el pollo durante 35-40 minutos. A mitad del tiempo de cocción, puedes abrir el horno para rociar el pollo con los jugos de la bandeja, asegurando que quede bien glaseado. Verás cómo el glaseado carameliza, dándole un brillo apetecible al pollo.

Paso 5: Servir el pollo glaseado acompañado de arándanos y decorar con romero fresco

Tras los 40 minutos, el pollo estará dorado y lleno de sabor. Retíralo del horno y deja que repose unos minutos antes de servirlo. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y mantengan el pollo jugoso por dentro. Acompaña cada muslo con los arándanos cocidos y el glaseado sobrante de la bandeja para resaltar el contraste de sabores.

Decora con romero fresco antes de servir para dar un toque aromático final. Este detalle no solo mejora la presentación, sino que también intensifica el sabor herbal del plato. Sirve el pollo con una guarnición ligera para equilibrar los sabores intensos

Consejos útiles

Si buscas agregar un toque crujiente a este plato, las almendras fileteadas son una excelente opción. Al tostar ligeramente las almendras durante el proceso de horneado, se consigue una textura que contrasta de manera deliciosa con el pollo tierno y los arándanos glaseados. Además, las almendras aportan un extra de nutrientes y grasas saludables a la receta.
Para complementar el sabor del pollo glaseado con arándanos, te recomendamos acompañarlo con una guarnición ligera y fresca. Una ensalada de hojas verdes o una mezcla de verduras asadas al horno equilibrarán la dulzura del glaseado y aportarán un contraste de texturas. Ingredientes como espinacas, rúcula o zanahorias asadas son opciones ideales.
Si prefieres una opción más ligera, las pechugas de pollo también funcionan bien. Solo debes tener en cuenta que se cocinan más rápido y pueden secarse si se hornean durante demasiado tiempo. Ajusta el tiempo de cocción para mantener la pechuga jugosa, y asegúrate de cubrirla bien con el glaseado de arándanos.

Preguntas frecuentes

¿Se puede sustituir el romero por hierba?

El romero fresco es una parte fundamental de esta receta por su sabor distintivo y cómo complementa el dulzor de los arándanos. Sin embargo, si no tienes romero a mano o prefieres otra hierba, el tomillo es una excelente alternativa. El tomillo tiene un sabor más suave pero similar, que combina bien con el pollo y el glaseado de frutos rojos.

Otra opción sería el orégano fresco, aunque su sabor es más intenso. Es importante ajustar las cantidades según la hierba que elijas, ya que algunas pueden dominar el sabor si se usan en exceso. Experimenta con pequeñas cantidades hasta encontrar tu combinación perfecta.

¿Es apto para dietas bajas en calorías?

Sí, este plato puede adaptarse fácilmente a una dieta baja en calorías. El pollo es una excelente fuente de proteína magra, especialmente si se opta por la pechuga en lugar de los muslos. Además, los arándanos aportan pocas calorías y muchos nutrientes, lo que hace que este plato sea saludable y nutritivo.

Para reducir aún más las calorías, puedes moderar la cantidad de miel y aceite de oliva que utilizas en el glaseado. También puedes acompañar el pollo con una guarnición de verduras al vapor o ensaladas frescas, en lugar de opciones más pesadas como patatas o arroz.

¿Puedo hacer esta receta con otros frutos rojos?

Sí, aunque los arándanos son los protagonistas de esta receta, puedes sustituirlos por otros frutos rojos de Cuna de Platero, como frambuesas, moras o fresas. Cada uno de estos frutos aportará su propio toque de sabor y color, haciendo que la tarta tenga un perfil ligeramente distinto, pero igualmente delicioso y saludable. Las frambuesas, por ejemplo, añaden un toque más ácido, mientras que las fresas aportan más dulzor, creando una combinación refrescante y llena de matices.

Conclusión

En Cuna de Platero, creemos en la importancia de ofrecer productos frescos y saludables, como nuestros arándanos, que no solo realzan el sabor de cualquier plato, sino que también aportan beneficios nutricionales. El pollo glaseado con arándanos y romero es una receta perfecta para quienes buscan una opción saludable y deliciosa, combinando lo mejor de la cocina tradicional con un toque moderno gracias a los frutos rojos. Es un plato fácil de preparar, ideal para cualquier ocasión y con un equilibrio perfecto entre sabores dulces y salados.

Esperamos que esta receta os inspire a disfrutar de la cocina con ingredientes frescos y de temporada. Al incorporar los arándanos de Cuna de Platero, estamos trayendo lo mejor de nuestros cultivos a vuestra mesa. Además, esta receta puede adaptarse a diferentes preferencias, lo que la convierte en una opción versátil para toda la familia. No dudéis en probarla y descubrir cómo el sabor de los arándanos frescos transforma por completo este plato clásico de pollo.